Sfax y el encanto secreto de su medina

Considerada ‘la capital económica’, Sfax, ubicada a unos 270 km al sur de Túnez, es la es la segunda ciudad más poblada del país y que cuenta con una fuerte economía que, básicamente está vinculada en el fosfato y la prensa del aceite lo cual le da un olor tan particular que se convierte en una de sus características.

Este perfil de ciudad de trabajo puede no resultar demasiado atractivo en un primer momento al turista que llega a Sfax pero, sin embargo, esconde uno de los mejores secretos guardados del país: su medina.

Muy diferentes de las medinas del circuito turístico de Túnez, Sousse o Hamammett,  el zoco de la medina de Sfax es la imagen viva de un espacio donde conviven el comercio y el ocio en Túnez, una ciudad trabajadora del siglo XXI que, sin embargo, vive en consonancia con su pasado histórico.

En la medina no se venden los típicos souvenirs consumidos por los turistas sino que la gente del lugar acude a comprar allí los productos del día a día, en tanto que en cada esquina o rincón de sus calles, se respira la bulliciosa actividad de una ciudad dinámica y moderna.

Actividades en Sfax

Todavía conserva intactas las murallas que dividen nítidamente la atmósfera de la nueva y vieja ciudad.

Así organizada, encontramos una calle para los herreros, otra para ropa, otra de especias, un mercado de pescado, otra calle para afiladeros y próximos a la mezquita es posible hacer un alto en alguno de los muchos bares para descansar y tomar té o chicha.

Los hostales más baratos se encuentran en la primera calle a la derecha y la estación de trenes se halla a tan sólo 5 minutos a pie de la muralla que divide la medina, lo cual resulta muy conveniente si deseas hacer una parada, recorrer por unas horas la ciudad y tomar el siguiente tren.